sábado, 15 de noviembre de 2008

H2 Grupo de Rua Teatro Albéniz



El Grupo de Rua fue fundado en 1996 por Bruno Beltrao y Rodrigo Bernardi, con jóvenes que bailaban el hiphop y street dance. En 2000, Beltrao ingresa en la Facultad de Danza de la Universidad de Rio de Janeiro donde entra en contacto con ideas nuevas que reestructaron su entendimiento del hiphop.
The Grupo de Rua was formed in 1996 by Bruno Beltrao y Rodrigo Bernardi with young hiphop dancers. In 2000 Beltrao enrols in the Dance Faculty of the University of Rio de Janeiro where he comes into contact with new concepts that make him restructure his ideas on hiphop and streetdance.

Hay una primera vez para todo, y eso ha sido ver ‘hiphop intelectual’. Empezaron con un rótulo que ocupaba toda la pared de detrás: «hiphop loves the beat of music»: 3 individuos haciendo virtuosismos durante un par de minutos. La palabra «music» desapareció, la música literalmente se quitó y durante largos minutos vimos un solo, en silencio. Entró otro tipo y bailó, él solo, al son de un ‘bong’ esporádico; era más bien un calentamiento de tai-chi. Después de lo que parecía eterno, apareció otro que ya tuvo como acompañamiento un monótono zumbido, roto a veces por un ‘ping’. Para entonces ya se había quitado la palabra «beat»... y así sucesivamente, mientras se quitaban las palabras del rótulo y se iban añadiendo sonidos a la música, empezaron a bailar en parejas, en tríos, en cuartetos, cada vez más rápidos... Y, por fin, durante los últimos más o menos cinco minutos, con una música maravillosa, bailaron todos, moviéndose casi hipnóticamente, se deslizaron por todo el escenario, corriendo hacia atrás (qué bien lo hacían), desplazándose lateralmente, haciendo chasseés a lo capoeira. Aunque a
veces más que bailarines parecían presos haciendo ejercicio en el patio de la cárcel.
Bruno Beltrao ha deconstruido (un concepto tan de moda) el hiphop. Lo ha desmenuzado y lo ha dejado en sus movimientos más básicos, y ha hecho un análisis minucioso del vocabulario. Como tesis doctoral, yo le daba un sobresaliente por su planteamieno; pero como espectáculo, aguantar en silencio casi 40 minutos, de los 50 que duró, fue muy duro, y para mí, muy pretencioso.

"Intellectual hiphop" is not what one expects to see but there´s a first time for everything. The show started off with a projection on the back wall HipHop Loves the Beat of Music and for a few minutes three of the dancers showed off their best break-moves.Then,the word "music" switched off, and so it did, and for a long time, one of the dancers moved in silent, slow motion. Another dancer then took his place and to the occasional "bong " he did what looked like a tai-chi warm-up. After what seemed an eternity he was replaced by a third boy who moved, a bit faster, to a monotonous hum, broken every now and then by a "ping". By this time the word "beat" had gone. Progressively,as the words switched off, the boys started coming in, in twos, threes and sometimes quartets dancing faster and faster, while more elements were added to the soundtrack. And finally, for the last five minutes or so, they flowed on and off the stage, running backwards (which they did really well), dancing sideways, "chassée-ing" forward "a la capoeira". It was hipnotic, poetic and the music was fantastic, even though at times it looked like the exercise yard at the penitentiary.
Bruno Beltrao has deconstructed (a concept that is so in fashion these days) hiphop. He has broken it down to its basics and has done a very thorough analisis of its vocabulary. As a doctoral thesis I would give him Honours with Distinction but as a spectator, in a theatre, wanting to be entertained, it was heavy-going sitting through almost forty of the fifty minutes in silence or almost. Their sand-shoes squeaking on the stage did add extra sounds. Overall it was tedious and pretentious.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

mpletamente en las dos crónicas del Mes de Noviembre, aunque debo decir que has sido demasiado "buena" con los brasileños, personalmente, han sido una verdadera decepción, hacía tiempo que no me aburría tanto en un espectáculo de baile.

Anónimo dijo...

No quería aparecer como anónimo, soy Marisa y, continuando con mi comentario, los alemanes?, holandeses? un verdadero espectáculo y nivel técnico superior. Pero los brasileños....lo único bueno fueron los 2 minutos de inicio que prometía un buen espectáculo, pero debe ser que el hip hpl "intelectual" no debo entenderlo muy bien,...ni quiero!!
muy buenas crónicas, sigue así !!
Marisa